Es un
tratamiento de medicina alternativa que se fundamenta en la relación de la
estructura de la columna vertebral y la función corporal y la forma en que esa
relación influye en la salud. Establece que las enfermedades son una
consecuencia de la acción del sistema nervioso en las funciones de los tejidos,
por lo tanto, mediante la manipulación de los órganos afectados, especialmente
de la columna vertebral, se puede restablecer la salud del paciente. Así, este
tratamiento equilibra el flujo de la energía corporal que se ha visto
obstaculizado por las tensiones o presiones de la vida cotidiana.
La
quiropraxia es una práctica que se remonta a la antigua Grecia. Se afirma que
Hipócrates fue el padre de esta disciplina y que sirvió para curar a personas
alrededor del mundo como los egipcios, babilonios, japoneses e indios, entre
otros. Sin embargo, Daniel David Palmer es considerado como el iniciador de la
quiropráctica moderna. En 1895, gracias a la curación de un hombre que llevaba
sordo 17 años, se ganó el reconocimiento mundial. Palmer se dio cuenta que la
sordera se había producido por una lesión a la columna, la que corrigió y le
permitió al hombre recuperar la audición.
El
quiropráctico, para ubicar el punto del conflicto, comienza tocando la espalda
por la columna, hasta encontrar el lugar de origen del dolor. De ahí trabaja
sobre los discos de la columna, las articulaciones, los nervios y la médula
espinal para componer el sistema. Es por eso que también se les llama
‘componedores de huesos’ EL quiropráctico debe preocuparse de conservar o
recuperar la movilidad, alineación, flexibilidad y descarga de la columna
vertebral.
Si se
está en presencia de dolor de cabeza, vértigos, zumbidos en los oídos, dolores
en las regiones cervical, dorsal y lumbar, neuritis y todos los problemas
óseos, articulares y musculares se puede visitar a un quiropráctico para que
busque el origen del problema y lo solucione. Sin embargo, éste no siempre
podrá ofrecer una respuesta ya que depende de la naturaleza de la alteración y
las posibilidades de corrección por medio de la quiropraxia. El especialista
hará un examen de las posturas del paciente y palpará su columna para estudiar
la condición en la que se encuentra.
El procedimiento de
corrección se realiza por medio de la aplicación de una presión rápida y
profunda sobre la articulación vertebral o extravertebral. En caso de fracturas
óseas no se puede aplicar este tratamiento porque puede agravar la situación.